Cómo reducir el burnout de tus trabajadores de la mano de la ley de 40 horas laborales
La reciente implementación de la Ley de 40 horas laborales en Chile representa una oportunidad única para que las organizaciones no solo cumplan con la normativa, sino también mejoren el bienestar de sus personas y aumenten así su productividad. En MAGO tenemos claro que la reducción de la jornada puede ser una herramienta poderosa para combatir el burnout, una condición de agotamiento físico y emocional que afecta a muchos trabajadores en la actualidad. A continuación, te presentamos algunas estrategias se pueden adoptar para aprovechar al máximo esta nueva ley y guiar a los colaboradores de la mejor forma posible.
1. Reorganización del trabajo y fomento del equilibrio vida/trabajo
Reducir la jornada laboral a 40 horas semanales ofrece una excelente oportunidad para reorganizar el trabajo y fomentar un mejor equilibrio entre la vida profesional y personal. Es justamente ahora cuando hay que reevaluar las cargas laborales y los horarios. Llegó la hora de implementar horarios más flexibles, que permitan a las personas ajustar sus jornadas laborales según sus propias necesidades. Por lo mismo, es imprescindible trabajar en una comunicación activa al respecto, comentando los beneficios y expectativas que vienen de la mano de esta nueva ley. Hoy más que nunca, serán los mailings, boletines, reuniones y plataformas internas, los principales aliados donde se podrá explicar en detalle cómo manejará cada empresa el tiempo y cuáles serán los apoyos que recibirán las personas para adaptarse a este nuevo ritmo.
2. Promoción de una cultura organizacional saludable
Un ambiente de trabajo saludable y una cultura organizacional que valore el bienestar de los empleados son esenciales para prevenir el burnout y son parte de lo que esta nueva ley busca evitar. Una práctica que recomendamos es promover programas de salud mental y bienestar, tanto como talleres de manejo del estrés, como actividades recreativas y de mindfulness. La clave es que llevemos a los trabajadores a un espacio de contención y positividad, donde les mostremos las oportunidades que trae consigo la nueva ley, tanto como seguir potenciando las buenas experiencias dentro de las organizaciones y el buen ambiente de trabajo, de la mano de un tono cuidadoso y cercano, ya que todos estamos viviendo esta transición de manera conjunta.
3. Mejora de la productividad y eficiencia
La reducción de horas no es igual a una reducción en la productividad. De hecho, si las organizaciones impulsan la estrategia adecuada, puede llevar a una mayor eficiencia. Un paso clave para lograr una meta como la antes mencionada, podría ser desarrollar pequeños programas de gestión de tiempo de manera efectiva, que mezcle temas personales y laborales. También es necesario apoyar a los trabajadores para que no se sientan agobiados en este proceso, por lo que sugerimos el uso de herramientas y tecnologías que los ayuden a automatizar algunas tareas repetitivas y así evitar la sensación de que no se alcanzarán a sacar adelante todas las tareas. Tal vez, esta es una gran oportunidad para hacer un par de reestructuraciones en algunas áreas o equipos, mejoras en proceso que signifiquen una mejora en la colaboración y eficiencia.
Finalmente, en MAGO creemos que la implementación de la ley de 40 horas, es una oportunidad única para mirar hacia adentro y mejorar las prácticas laborales. Al reorganizar el trabajo, promover una cultura de bienestar y poner foco en una productividad eficiente, las empresas pueden no solo cumplir con la nueva normativa, sino también crear un entorno que minimice el burnout y mejore la calidad de vida de sus personas. Con una comunicación interna efectiva, estrategias de recursos humanos bien diseñadas y un enfoque en el desarrollo organizacional, todos podrán guiar a sus colaboradores a través de este cambio de manera positiva y productiva.